Según el estudio “NextGen Travellers and Destinations” realizado por Deloitte y Google, España será el país del mundo más visitado por los turistas en 2040. Para entonces, se espera que España cuente con 110 millones de llegadas desde el extranjero, superando a Francia (105 millones), EE.UU. (100 millones), China, México e Italia (90 millones cada uno).
En 2040, el número de viajes estimado en todo el mundo alcanzará los 2.400 millones, casi mil millones más que antes de la pandemia de Covid-19. El estudio concluye que el 45% de los turistas se concentrará en cuatro destinos: Mediterráneo (480 millones), Sudeste Asiático (255 millones), Oriente Medio (175 millones) y Caribe (145 millones). Entre los 15 países más populares en 2040 figurarán Arabia Saudí, Indonesia y EAU, lo que demuestra el auge de Oriente Medio y Asia-Pacífico.
En cuanto a los mercados turísticos emisores más fuertes en 2040, los cinco primeros serán China, con 310 millones de salidas, EE.UU. (260 millones), Reino Unido, India (145 millones cada uno) y Alemania (140 millones). Pakistán, Brasil, Arabia Saudí, Indonesia y México también formarán parte de los diez primeros, y España ocupará un lugar en la segunda decena.
El futuro del sector no solo vendrá marcado por el número de turistas, sino también por la tecnología, como la realidad virtual, la inteligencia artificial y la traducción en tiempo real. Otros factores clave serán el cambio del perfil del viajero, relacionados entre otras cosas con la mayor longevidad o la diversidad sexual y racial, así como con los movimientos culturales y sociales.
Para España, las previsiones del informe suponen el crecimiento de un sector que ya representa casi un 13% del PIB y el 17% del total del empleo, pero que, sin embargo tiene sus detractores por su impacto en las comunidades locales y la masificación de algunos destinos. Sin embargo, existe una alta probabilidad de que para 2040 el país cuente con nuevos destinos que atraigan a turistas extranjeros. Esto diversificará la oferta turística actual, centrará a los turistas en nuevas experiencias y destinos y al mismo tiempo reducirá la estacionalidad.
