El nuevo campus de la Universidad Loyola, ubicado en la localidad sevillana de Dos Hermanas, ha obtenido el reconocimiento al centro universitario más avanzado del mundo en la aplicación de tecnologías digitales modernas. Al mismo tiempo, se le ha otorgado el certificado LEED Platino, por su apuesta como centro educativo en la utilización de estrategias encaminadas a la sostenibilidad.
Desde el inicio de este proyecto, el despacho de arquitectos «Luis Vidal + arquitectos» puso énfasis en la salud de los estudiantes junto con el cuidado responsable del medio ambiente. A la hora de elaborar su diseño, se tuvieron en cuenta factores tan importantes como la ubicación, el soleamiento, la temperatura, la eficiencia en el uso del agua y la electricidad, y el uso de materiales sostenibles.
A este respecto, alrededor del 20% de los materiales del edificio provienen de usos anteriores, y más del 30% se extrajeron y produjeron a una distancia de menos de 800 km del lugar de construcción. De esta forma, se consiguió evitar los perjuicios medioambientales que provoca el transporte de materiales. Con el fin de utilizar los recursos hídricos de manera eficiente, se instaló un sistema de recuperación parcial de aguas grises para los baños, así como un aljibe para la recolección de agua de lluvia.
Asimismo, se diseñó toda la envolvente del edificio (cubiertas, fachadas y ventanas) en pro de minimizar las pérdidas energéticas excesivas. Esto, añadido a otras estrategias, como la generación propia de energía renovable mediante paneles fotovoltaicos, hacen que el edificio sea un 40% más eficiente. A su vez, el interior del edificio destaca por su aislamiento térmico y acústico, impermeabilización a la lluvia y protección frente al fuego. Además, el campus de la Universidad de Loyola se ha adaptado completamente y con facilidad, a las nuevas normativas y recomendaciones que existen para combatir la propagación del Covid-19.
