Durante los últimos cinco años el mercado inmobiliario español de lujo ha experimentado un repunte y está cada vez más en el punto de mira de inversores españoles y extranjeros. Entre enero de 2019 y marzo de 2024, la oferta de vivienda con precios superiores a 800.000 euros ha aumentado un 150%.
Así se desprende del último informe presentado por Fotocasa e Infinitum, que destaca que los precios de este tipo de inmuebles residenciales también siguen esta tendencia claramente alcista. A principios de 2019 el precio medio de la vivienda de lujo era de 1,56 millones de euros, desde entonces se ha incrementado un 28%, alcanzando un máximo histórico de 1,99 millones de euros en mayo de este año.
Al igual que en el mercado inmobiliario convencional, en España existe una importante disparidad en la distribución territorial de las viviendas de lujo. Mientras que las áreas metropolitanas de Madrid y Barcelona tienden a liderar el conjunto, el sector inmobiliario de lujo está dominado por las regiones más turísticas.
Además, las preferencias de los compradores potenciales han cambiado en los últimos cinco años. Ya no se trata solo de comprar una vivienda de calidad, sino de invertir en un estilo de vida que abarca aspectos como la sostenibilidad, la tecnología avanzada y la privacidad.
Así, según el informe, la provincia de Málaga es la región de España con mayor proporción de viviendas en venta en el segmento de lujo (por encima de 800.000 euros): 23,2% del total nacional de inmuebles de estas características y un precio medio superior a los 2,6 millones de euros. Le siguen Alicante (18,9% y 1,6 millones de euros), Baleares (12,7% y 2,3 millones de euros), Barcelona (11,5% y 1,6 millones de euros), Madrid (8,8% y 1,8 millones de euros) y Girona (5,9% y 1,5 millones de euros). Sin embargo, esta oferta no se corresponde con la demanda, ya que la mayoría de los compradores potenciales desean adquirir propiedades de lujo en Madrid (35%) y Barcelona (14%).
En la actualidad, la mayoría de los compradores son ciudadanos españoles (77%), pero la cuota de inversores extranjeros está creciendo y ha alcanzado su máximo (23%).